Gracias a aquellos benditos hackers que valiéndose de todos sus conociemientos en informática, han logrado poner al alcance de nosotros los mortales, algunos preciados contenidos. Que Dios los bendiga.
He visto Nana, anime basado en el manga de Ai Yazawa gracias a algún freak que tuvo la genial idea de subir la primera temporada al maravilloso You Tube. Aunque en otras partes del mundo ya llegó la segunda temporada, yo me he conformado con ver hasta el capítulo 47, con eso me bastó para enamorarme locamente de Nana Osaki, y adorar a Nana Komatsu, disfrutar los destellos de yuri entre ellas y el drama de telenovela que sufren.
Bajé el soundtrack desde hace una año más o menos, cada día las canciones me parecen más llegadoras. Son perfectas para sentarse al lado de la ventana llorada de lluvia mientras se cantan esas letras de lagrimas negras y collares con picos.
Por último, leí el manga desde internet. Artísitcamente es un logro por el uso de nuevos recursos gráficos en conjunto con el trazo japonés original. Si me pareció dramático el anime, el manga lo supera veinte veces, abandoné Les Miserables por acabar los capítulos hasta ahora disponibles. En total son 83 capítulos, aunque en los estudios se sigue trabajando para aumentar el número y regalarnos más días de insomnio.
Este retrato de dos personalidades diferentes que se unen por un destino maldito y un nombre que lleva en él la mala suerte. Nana, nombre japonés que además es la forma de escribir el número 7, es el nombre de las dos protagonistas de la historia que se conocen en un tren hacia Tokio, después de seguir cada quien su camino se encuentran al compartir la renta del apartamento 707 en el séptimo piso de un edificio occidental, al estilo de la Escuela de Chicago. Las dos en busca de un futuro diferente al que les marca su lugar de orígen, diferente de las espectativas que tienen otros para ellas y sobre todo, un futuro construido sin intervenciones.
Al menos para estudiar el trazo, para disfrutar música punk, para ver dibujitos lindos con ropa más linda o para vivir unas semanas frente a la chompu, vale la pena descargarse la serie.
